martes, 14 de enero de 2020

DON MARCIANO DE LEÓN GRNADOS - BIOGRAFÍA



MARCIANO DE LEÓN GRANADOS

 Don Chano de cariño, visionario de su tiempo, de amor profundo por el terruño,  contemplando atardeceres, sus pensamientos tomaban forma a manera de canción o poesía; hombre de fe profunda y convicciones arraigadas; honorable padre de familia, precursor del arte y la cultura.
“A  mi lindo rinconcito,
Yo le canto esta canción,
A Colón pueblo bendito
Que llevo en el corazón”

 Con este verso inicia el  corrido a Colón, que inspiró a don Marciano de León, el amor tan profundo  que sentía y que tanto orgullo le hacía sentir.    Marciano De León Granados  nació el 1 de noviembre  de 1926 en Colón, Qro. Hijo único del matrimonio formado por José de León Jiménez y Jacinta Granados Mata. La  formación católica que desde niño recibió, marcó  toda su vida.
En Colón, estudió en los colegios de “Nuestra Señora de Guadalupe “y  “San Juan Bosco”. Más tarde, se trasladó a  la ciudad de Querétaro  donde estudió en el Seminario Diocesano. Su afición por el arte, lo llevó a estudiar música sacra en el conservatorio  “J. Guadalupe Velázquez”, bajo la dirección del señor canónigo Don Cirilo Conejo Roldan. Ahí estudio solfeo,  canto y aprendió  a tocar  piano,  órgano, violín, acordeón, guitarra y  mandolina entre otros.

Por motivos familiares regresó a Colón donde se dedicó al oficio de la artesanía de lana y posteriormente al comercio de abarrotes. En 1948  con su   trío “Los Ruiseñores” participó en la radiodifusora queretana XENA, obteniendo el primer lugar con la canción  “Mi Serenata “, bolero  de su propia inspiración. En 1960 fundó el “Mariachi Colón” y posteriormente integrante del “Mariachi 72”.

El 30 de noviembre de 1963, se casó con Ma. Dolores Reséndiz Martínez, teniendo 6 hijos: Sandra, Álvaro, María Dolores, Norma, Arturo y Octavio.
Fue organista del templo parroquial de San Francisco de Asís en Colón; del Santuario de Nuestra Señora de los Dolores de Soriano  y de la Parroquia de la Divina Providencia de Ezequiel Montes. Como maestro de capilla Integró un coro de tenores y bajos, donde impartió clases de solfeo, y en latín, enseño la misa “fácil”, la de “Botasso”, ”Guadalupe” y “Réquiem”. Dirigió el coro de niños  de la escuela Florencio Rosas y el coro femenil de la Parroquia.

Conocedor del arte y admirador de la naturaleza, se distinguió por su talento al dibujo, a la  escritura y  a la composición musical. Sus obras más destacadas (letra y música) son: Serenata Jarocha, La Mula, Corrido de Ezequiel Montes, María Dolores  (Composición dedicada a su esposa), y  los más conocidos   El Corrido a Colón y Mi Dolorosa, la cual es una oración a la Virgen  de Los Dolores  de Soriano, inspirada con motivo de su coronación y su nombramiento como patrona de la Diócesis de Querétaro.

 Motivado por los relatos que oía de sus padres y abuelos durante su niñez, y alentado Por el Párroco J. Guadalupe Nieves (párroco de Colón), dedicó durante varios años, parte de su   tiempo a realizar entrevistas a  cristeros, familiares y testigos  de la época, logrando  en el  mes de junio de 1999 la publicación del libro “Testimonios del Movimiento Cristero en Colón”, libro único en el estado de Querétaro que presenta las experiencias que  vivieron en carne  propia estas personas,  durante la persecución religiosa de 1928.

En el año de  2014 don Marciano, fue distinguido  por el Gobierno del Estado de Querétaro, con la publicación de su biografía  en el libro “Querétaro en el siglo XX, Personajes de la vida cotidiana”; con el calificativo de “Un Poeta Colonense”.

Don Chano (como se le conoce con cariño), consciente de  que una parte de la historia no podía quedar en el olvido,  nos dejó un valioso legado  que hoy podemos valorar  y apreciar y  que será conocido  por futuras generaciones.

#DescubreColón



Cristóbal Vega Prado
Cronista Municipal

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